Proyectos de Inversión: Qué son, Tipos, Etapas y Fases

April 13, 2023

Si estás buscando dónde invertir en 2023 una parte de tus ahorros para sacarles algo de beneficio (más allá de contar con métodos de ahorro), estarás buscando proyectos de inversión que se ajusten a tus necesidades. Pero, ¿tienes claro los tipos de proyectos de inversión que existen y cómo funcionan? Si aún andas algo perdido, no dejes de leer, ya que a continuación te contamos todo lo que necesitas saber sobre los proyectos de inversión.

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¿Qué es un proyecto de inversión?

Un proyecto de inversión es un plan de negocio que requiere de una inyección de capital monetario o humano para echar a andar y del que se prevé que generará beneficios en un plazo determinado. Estos proyectos tienen una naturaleza temporal, ya que se trata de inversiones concretas con objetivos concretos (por ejemplo, iniciar un negocio), y los hay de distintos tipos.

Tipos de proyectos

Existen muchas maneras de clasificar los proyectos de inversión: según el sector económico al que se refieren, por el área de influencia geográfica, por si la inversión se va a hacer sobre bienes tangibles o intangibles (servicios). Te los dejamos a continuación:

  1. Proyectos de inversión primarios: Inversiones en el sector primario de la economía, como la agricultura, la pesca y la minería.
  2. Proyectos de inversión secundarios: Inversiones en el sector secundario de la economía, como la construcción, la industria manufacturera y la energía.
  3. Proyectos de inversión terciarios: Inversiones en el sector terciario de la economía, como el comercio, la hostelería, los servicios financieros y la educación.
  4. Proyectos de inversión cuaternarios: Inversiones en el sector cuaternario de la economía, como la investigación y desarrollo, la tecnología y la información.

Además, los proyectos de inversión también pueden clasificarse según su área de influencia geográfica, por ejemplo:

  1. Proyectos de inversión nacional: Inversiones que se realizan dentro del país de origen.
  2. Proyectos de inversión regional: Inversiones que se realizan en una región específica del país, como una provincia o un distrito.
  3. Proyectos de inversión internacional: Inversiones que se realizan fuera del país de origen, en un país extranjero.

Otra manera sencilla de establecer distintas tipologías es empezando por distinguir entre proyectos de inversión pública y proyectos de inversión privada.

  • Los proyectos de inversión pública se realizan con fondos del estado y no están abiertos a los inversores privados. Su propósito, en principio, no es conseguir beneficios sino ofrecer servicios a la ciudadanía. No obstante, existen proyectos públicos que sí utilizan fuentes de financiación privada, por ejemplo aquellos que implican subcontratas a empresas privadas.
  • Los proyectos de inversión privada, en cambio, son proyectos que se nutren de los fondos de inversores privados y, en su mayoría, pretenden generar beneficios. Sin embargo, hay que señalar que también existen proyectos de inversión sociales, no orientados a los beneficios, que evidentemente no son la mejor opción para sacar rentabilidad a los ahorros.
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Etapas de un proyecto de inversión

Ahora que ya sabemos que son los proyectos de inversión y qué tipos de proyectos de inversión existen, vamos a explicar cómo funcionan.

Estudiar el proyecto de inversión

El primer paso que hay que dar es encontrar aquellos proyectos de inversión que puedan encajar en tus objetivos. Una vez identificados, esos proyectos deben ser evaluados con calma, para comprender los riesgos y beneficios potenciales, empezando así a estudiar la viabilidad del proyecto.

Dado que los proyectos de inversión pueden ser muy arriesgados en algunos casos, determinar cuál es la mejor opción para nosotros es crucial. Para ello se realiza un estudio previo, llamado estudio de prefactibilidad: una visión general de la logística de un proyecto, las necesidades de capital, los principales retos a los que se enfrenta la empresa en cuestión…

Para ello, se realizan varios tipos de análisis:

  • Análisis de mercado: Se analiza el mercado para determinar la demanda, el tamaño del mercado y la competencia.
  • Análisis financiero: Se realiza un análisis financiero exhaustivo de la oportunidad de inversión para determinar su rentabilidad potencial. Se establece la cantidad de dinero que se requiere para que el proyecto funcione, los riesgos de la inversión y la previsión de beneficios en cuanto a plazo y cantidad.

Si estos análisis previos dan buen resultado, se suele realizar un segundo estudio (llamado de factibilidad) que profundiza en algunos aspectos.

La importancia de estos estudios es enorme, ya que son los que permiten al inversor ser consciente de todos los riesgos y actuar en consecuencia.

Estructura de la Inversión

Después de evaluar y analizar la oportunidad de negocio que supone cada uno de los proyectos de inversión que nos hayan llamado la atención, hay que planificar la inversión. Eso implica tener claras las necesidades de inversión del negocio y las condiciones que hay que pactar para que esa inversión se ajuste a tus objetivos financieros y expectativas de rendimiento.

Es en este momento cuando se decide la cantidad a invertir y si la inversión incluirá o no algún tipo de participación en las decisiones de la empresa. También es ahora cuando se determina si se va a tratar de un préstamo que será devuelto con intereses o de una participación que aportará al inversor una parte de los futuros beneficios.

Y, en caso de que se necesite financiamiento, se determina la fuente de financiamiento más adecuada para la inversión.

Implementación

Una  vez se ha determinado qué cantidad se va a invertir y bajo qué condiciones, se formaliza la inversión. En muchos casos una vez realizada la inversión, quién la realizaba se desvinculaba del proyecto, sin participar en él, y se limitaba a recibir la devolución de su dinero con intereses o su parte de los beneficios. Sin embargo, hoy existe una tendencia a monitorizar las inversiones para ayudar a lograr el rendimiento esperado.

Monitorizar proyectos de inversión es una tarea que puede realizar el propio inversor, aunque a menudo se deja en manos de profesionales especializados. En todo caso, la monitorización consiste en controlar que la inversión se destina a ejecutar lo planteado en la fase inicial del proyecto. Finalmente, cuando empiezan a llegar (o a faltar) los beneficios, se analiza la situación y se hace un plan de mejora de procesos para lograr los objetivos no conseguidos.

Gestión de Riesgos

Estrechamente relacionada con el punto anterior, la gestión de riesgos consiste en controlar los fallos que pueden surgir en el proceso de inversión (o de devolución de la misma) y reaccionar para solucionarlos.

Todos los proyectos de inversión tienen riesgos, que pueden ser de distinto tipo:

  • Riesgo de mercado, que se da cuando un activo pierde valor a causa de la fluctuación del mercado. La causa concreta puede ser una variación del patrón de consumo o un cambio en los precios.
  • Riesgo de crédito, relacionado con la incapacidad de una de las partes para asumir sus deudas. Si la empresa en la que se ha invertido tiene problemas para cobrar de alguno de sus clientes, puede que esto afecte a los beneficios y, por tanto, al rédito que esperábamos sacar de nuestra inversión.
  • Riego operativo, que se da cuando hay una mala gestión empresarial, falta de controles internos o incapacidad de los trabajadores. Este tipo de riesgos suele ser superable con una buena monitorización de la inversión.
  • Riesgo de liquidez, que implica que la empresa no dispone de efectivo en un momento dado (por ejemplo, porque ha realizado una gran inversión en materia prima) y no puede afrontar los pagos de su propia deuda. Aquí es importante ser consciente de que disponer de un elevado capital no es lo mismo que tener liquidez, ya que a menudo el capital está invertido en activos que no pueden monetizarse.

Salida

La salida del proyecto de inversión, ya sea a través de la venta de la inversión o la liquidación de la misma, debe estar bien planificada desde el principio.

Hay que tener en cuenta que la mayoría de contratos de inversión establecen penalizaciones por salida anticipada (si se pretende retirar los fondos antes del plazo acordado), por lo que hay que tener previstas todas las situaciones.

Evaluación del rendimiento

Una vez que se ha completado el proyecto de inversión, se evalúa el rendimiento para determinar si se alcanzaron los objetivos financieros y para identificar las lecciones aprendidas que se puedan aplicar en futuras inversiones.

Esta parte es especialmente útil cuando se trata de inversores primerizos que aún van un poco a tientas. Una buena evaluación de lo positivo y lo negativo de cada inversión os evitará repetir fallos y os permitirá ajustar más los criterios de elección de futuros proyectos de inversión.

En conclusión, los proyectos de inversión son todos aquellos planes de negocio que requieren de una inyección de capital para crecer y conseguir beneficios. Son una buena oportunidad para cualquier inversor interesado en sacarle rédito a su dinero. Sin embargo, hay que ser precavido y tomarse un tiempo para seleccionar el mejor proyecto de inversión. Es decir, hay que analizar todos los factores que influyen en el negocio en cuestión para asegurarnos de que:

  • Se ajusta a nuestros objetivos.
  • Está bien planteado y realmente puede ser rentable.
  • Los riesgos que pueda presentar son asumibles desde nuestra posición.
  • Cuando queramos dar por terminada nuestra participación en él no vamos a encontrarnos con barreras infranqueables.

Sólo una vez hayamos establecido claramente esos puntos podemos tirar adelante con el proyecto de inversión escogido y empezar a generar beneficios.

Conclusión

En conclusión, los proyectos de inversión son una herramienta importante para cualquier persona o empresa que busque maximizar su retorno de inversión. Los proyectos de inversión pueden ser de diferentes tipos y cada uno de ellos tiene sus propias características, ventajas y desventajas. Además, cada proyecto de inversión pasa por diferentes etapas y fases, desde la evaluación inicial hasta la implementación y el seguimiento. Es importante comprender cada una de estas etapas y fases para garantizar el éxito del proyecto de inversión.

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